“Si usted tiene un pan y yo tengo 1 euro y yo voy y le compro el pan, yo tendré un pan y usted 1 euro, y verá un equilibrio en ese intercambio; esto es, A tiene un euro y B tiene un pan, y a la inversa, B tiene el pan y A el euro. Este es, pués, un equilibrio perfecto.
Pero si usted tiene un soneto de Verlaine, o el teorema de Pitágoras, y yo no tengo nada, y usted me los enseña, al final de ese intercambio yo tendré el soneto y el teorema, pero usted los habrá conservado.
En el primer caso, hay equilibrio. Eso es mercancía.
En el segundo, hay crecimiento, eso es cultura.”