Cleopatra ascendió al trono a los 17 años y murió a los 39. Hablaba 9 idiomas. Conocía la lengua del Antiguo Egipto y había aprendido a leer jeroglíficos, un caso único en su dinastía. Aparte de esto, conocía el griego y las lenguas de los partos, hebreos, medos, trogloditas, sirios, etíopes y árabes.
Con este conocimiento, cualquier libro del mundo estaba abierto para ella. Además de idiomas, estudió geografía, historia, astronomía, diplomacia internacional, matemáticas, alquimia, medicina, zoología, economía y otras disciplinas. Intentó acceder a todos los conocimientos de su tiempo.
Cleopatra pasó mucho tiempo en una especie de antiguo laboratorio. Escribió algunas obras relacionadas con las hierbas y la cosmética. Desafortunadamente, todos sus libros fueron destruidos en el incendio de la gran Biblioteca de Alejandría en el año 391 d.C. C. El famoso físico Galeno estudió su trabajo, y pudo transcribir algunas de las recetas ideadas por Cleopatra.
Uno de estos remedios, que Galeno también recomendaba a sus pacientes, era una crema especial que podía ayudar a los hombres calvos a recuperar el cabello. Los libros de Cleopatra también incluían consejos de belleza, pero ninguno de ellos ha llegado hasta nosotros.
La reina de Egipto también se interesó por la curación a base de hierbas, y gracias a su conocimiento de idiomas tuvo acceso a numerosos papiros que hoy se encuentran perdidos. Su influencia en las ciencias y la medicina fue bien conocida en los primeros siglos del cristianismo. Ella, sin duda, es una figura única en la historia de la humanidad.